
La población urbana mundial ha aumentado significativamente en los últimos 50 años. En 2008, el porcentaje global de población urbana superó a la población rural; para 2018, el 55% de la población vivía en ciudades (PNUD, 2020). En los últimos años, la urbanización ha sido especialmente frecuente en el mundo en desarrollo (GIZ y ONUHábitat, 2015). Esto ha coincidido no solocon el crecimiento de las megaciudades en los países en desarrollo, que se definen como ciudades de más de 10 millones de habitantes (Naciones Unidas, 2014), sino también con el aumento de las ciudades secundarias y medias de más de un millón de personas. El PNUD (2020) proyecta que nueve de cada diez megaciudades estarán en el mundo en desarrollo en las próximas décadas. Sin embargo, los límites jurisdiccionales de dichas ciudades se han mantenido relativamente estables a pesar de un rápido cambio en su composición: expansión de los suburbios, una rápida proliferación de rascacielos y conexiones de transporte entre grupos de ciudades vecinas (GIZ y ONU-Hábitat, 2015).